La quinta edición del Festival Nuestro 2019, sucedió en Tecnópolis, el sábado 18 de Mayo, y Agenda Feminista dijo presente.

El line-up dejó ver que la mujer tiene un lugar cada vez más importante en los escenarios, y muchas de las artistas que estuvieron en esta edición se proclamaron feministas.

Les artistas se dividieron en tres escenarios, que permitieron el gran despliegue que el festival se propone. Los escenarios “afuera” e “íntimo”, se encontraban en el exterior, bastante cercanos permitiéndole al público pasar de uno a otro de manera constante; en cambio, el escenario “adentro” estaba aislado. A pesar de la amenaza de lluvia, la gente se mantuvo firme, demostrándolo sobre todo en el cierre con la banda El Kuelgue que brindó un show bajo el agua y nadie se movió de su lugar: siguieron saltando y cantando hasta el final del show. El Kuelgue propuso una lista de temas conocidas y para hacer pogo, generando un cierre festivo, se permitieron hacer una especie de pequeño stand up combinado con trap, al que llamaron stand-trap.

Sin dudas, una de las más esperadas de la noche fue Nathy Peluso , quien apareció en el escenario vestida de blanco, bailó, cantó y se sandugueó toda, con su ritmo que fusiona el trap, el jazz, el soul, la salsa, entre otros. El público corrió para no perderse un segundo. Habló de la Argentina, de esta tierra que la vio nacer, esta tierra como su lugar que lleva a donde vaya, después de eso vino un bolero y ahí estaba ella reviviendo las raíces para transformarlas, sin dejar de lado su esencia.

Nathy también se hizo eco del pedido por la despenalización del aborto. Con su pañuelo verde atado a la muñeca y expresó “Yo soy parte de toda lucha, todo amor y toda consciencia que sucede en este país”. Una vez más La Peluso se mostró como mujer empoderada y brillante, porque a ella no le falta corashe, y por eso todos los wachos la tienen que alabar.
El festival se propone ir hacia lo diverso, pasa por varios géneros y convoca a artistas nacionales como internacionales. Monsieur Periné de Colombia, inauguro el ritmo de baile con su música que mezcla el jazz, el swing y el pop, y se quedaba alguna duda de esto, Catalina García, la cantante con su vestido lleno de colores se movió y bailó por todo el escenario, y los solos de viento no hicieron más que aumentar el clima festivo. Cerrando su show, dedico a las mujeres el tema “Mi libertad”.

El evento le dio lugar a otras formas de expresión como la poesía oral que luchan por el lugar de la mujer.

Entre cantantes y poetas, también se encontró Señorita Bimbo. El lugar del stand up fue llevado a cabo por ella que expuso “nosotres estamos acá para tirar abajo el patriarcado”.

Silvina Moreno luego de presentarse en el escenario íntimo expresó para Agenda Feminista: “hay una mentalidad que se está corriendo de lugar por fin, hay una mentalidad medio antigua que está perdiendo fuerza. Se está cambiando la realidad, yo lo veo hasta en el semáforo cuando te ven en el auto como mujer y ya hay otro trato que antes, son detalles pequeños pero se nota que está cambiando. Me parece que a nosotras, las mujeres, nos da otra oportunidad, otro vuelo; y a mí me encanta como mujer poder inspirar a otras mujeres. Ahora estoy componiendo más, me estoy animando a hablar de ciertas cosas, que hace un tiempo me hubiese dado más miedo y creo que en el próximo disco se va a poder ver eso. Yo crecí entre mujeres, y me encanta que entre mujeres nos apoyemos.”

Al ritmo de alabame wacho alabame, Miss Bolivia se presentó casi terminando el festival con el pañuelo verde como bandera, apareció para dar lugar entre canción y canción al canto que sucede en las marchas. Era-ella y su música-una fiesta, bailando con esa cumbia que se quema y ya no se puede callar.

Por Florencia C. Barba Lijerón.

Fotos de Fla Paredes